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Cocina y gastronomía
PRODUCTOS VARIOS
El café - 6ª parte
Cómo se sirve el café (continuación)
Irlandés
s un café mezclado con whisky y rematado con nata por encima. Este café es un auténtico deleite en las noches de invierno. Su historia es corta, nació en 1942, cuando un chef de un restaurante de Port Foynes, se le ocurrió añadir whisky al café para que los pasajeros ateridos de frío de un vuelo que tuvo que regresar entraran en calor. El éxito fue inmediato.
Para elaborarlo, llene con café unas copas para vino, añada whisky previamente quemado con azúcar (el azúcar al gusto); lo habitual son dos cucharadas de azúcar por cada copa de whisky. A continuación vierta nata semimontada sobre el dorso de una cucharilla dispuesta encima del café; esto se hace para que la nata no se mezcle con el café.
Con 200 gramos de nata se pueden preparar unas 6 copas de café irlandés. Se puede decorar con canela en polvo el borde de la copa.
Turco o griego
Preparación de un café turco
Esta es una deliciosa bebida de sobremesa servida en diminutas tazas. Prepárelo para cuatro personas poniendo 1-1/2 tazas de agua de tamaño corriente en una cafetera turca o en un cazo con seis cucharaditas de azúcar. Lleve rápidamente a ebullición y añada tres cucharadas de café turco o griego. Haga que vuelva a hervir, retirando del fuego y dejando enfriar durante medio minuto.
Vuelva a poner al fuego y haga hervir de nuevo, retirándolo otra vez para que enfríe. Hierva una vez más, quite el cazo del fuego y añada unas gotas de agua fría. Eche un poco de la espumilla en cada una de las cuatro tacitas y vierta encima el café.
Helado
Para hacer un café helado, simplemente métalo previamente en la nevera cargado con azúcar, y después viértalo sobre una jarra llena de cubitos de hielo. También se puede añadir esencia de café a unas copas llenas de leche fría. Rematarlo con helado o añadirle un poco de nata.